CONTROLE SU IRA ANTES QUE ELLA LO CONTROLE A USTED DE ALBERT ELLIS |
Si bien la siguiente
síntesis es de acuerdo al libro “controle su ira antes que ella lo controle a
usted”, más que nada se enfoca en explicar que la ira o vivir con ira puede
traernos consecuencias entorno a nuestro alrededor y nuestra vida cotidiana, es
decir, la ira puede afectarnos tanto en nuestras relaciones personas ya que muchas
personas piensan o tienen la ideología equivocada que la ira que tengamos solo
la evocaremos en la persona que nos caiga mal o en la persona que nos hizo en
primera instancia llegar a ese punto; pero, lo cierto es que lamentablemente
actuamos de manera defensiva o hacemos desplazamiento con nuestras personas más
cercanas como lo es nuestra familia, cónyuge, hijos, padres, etc. Sin embargo
no caemos en cuenta que esto a la larga nos trae consecuencias como un
divorcio, una evitación por parte de la familia, nos estaríamos destruyendo
poco a poco sin pensar que nuestra ira afecta a todos evocándola contra ellos.
Incluso, podemos llegar a afectar de manera negativa nuestra relación laboral,
todos podemos llegar a tener un mal día con clientes molestos, jefes exigentes,
ambiente laboral hostil; sin embargo, si queremos llegar a tener éxito en la
parte profesional de nuestro trabajo lo importante es poder llevarse bien con
todos, o por lo menos tratemos de ser personas amigables, respetuosas, líderes,
agentes cambiantes de un territorio hostil. No nos dejemos llevar por los
sentimientos de ira ya que esto nos llevará a un declive total tanto como en
nuestra vida personal como nuestra vida profesional. Debido a este tipo de
sentimiento como lo es la ira, nace la TREC que es la Terapia Racional
Emotivo-Conductual; según la TREC si conseguimos cambiar nuestros pensamientos,
sentimientos y comportamientos de ira,
estaremos en condiciones de mejorar nuestra vida y ser personas más felices.
Sabemos que existen injusticias y no con esto quiero decir que debemos dejar
que pasen por encima de nosotros ni tampoco dejarse llevar por la situación,
cuando tenemos ira lo que hacemos es empeorar la situación ya que en ese
instante no somos capaces de detenernos a pensar o ser razonables, nos cerramos
completamente ante la situación y nos dejamos llevar por este sentimiento,
debemos entender que la ira fomenta las agresiones, pero a la vez debemos razonar
y detenernos a pensar si existen otras maneras de resolver los conflictos en el
momento de la situación que no solamente sea tener ira. ¿Pero qué pasa con las
consecuencias de salud de la ira?, la ira no solo afecta nuestra psiquis o
pensamientos o nuestros sentimientos, bastaría solo con un ataque de ira para
sufrir de afecciones cardiacas ¿Por qué sucede esto?, bueno sucede algo simple
llamado “reacción de emergencia”, un ejemplo bien simple; cuando nos
encontramos en una situación de peligro pueden ocurrir dos situaciones: una
sería huir ante el peligro ya que ese sería un mecanismo de defensa, otro sería
enfrentarnos a la situación y enfadarnos por ello; entonces este es el momento
en el cual llegamos a conocer nuestro cuerpo y porque ocurre esta reacción de
emergencia que incluso puede llegar a afectarnos nuestra salud; entran los
cambios físicos, como por ejemplo, la tensión muscular, el ritmo cardiaco, el
respiratorio y el metabolismo, estos cambios nos ayudan a tener nuestro cuerpo
listo para la acción; también influyen la adrenalina y el flujo sanguíneo,
recordemos que no todos los cuerpos u organismos reaccionan de la misma manera,
cada persona es un mundo diferente, piensan diferente, reaccionan diferente es
decir que su organismo reaccionara diferente frente a la situación. Otras
consecuencias en cambio pueden ser menos evidentes, como por ejemplo; la
depresión, los sentimientos de culpa, la baja tolerancia que podamos llegar
ante la frustración y esto nos lleva a problemas personales como los que
mencione hace un instante al principio de la síntesis.
Tenemos que caer en cuenta que la ira no se resolverá
sola, es decir existirán falacias acerca de cómo reducir nuestra ira; la
falacia número uno indica que muchos piensan que expresando la ira de manera
activa podemos llegar a reducirla, otra seria tomarnos un tiempo muerto cuando
nos enfadamos, la tercera falacia indica que la ira nos ayuda a conseguir lo
que queremos, la falacia cuatro nos muestra que si hacemos un estudio del
pasado hace disminuir la ira, la falacia cinco resalta que los acontecimientos
externos provocan nuestra ira. Debemos ser conscientes que para reducir los
sentimientos de ira debemos hacer frente a las situaciones de la vida, a los
obstáculos que se nos presentan, tenemos que sacarnos la idea de los momentos
injustos, las personas difíciles y aquellas frustraciones que nos llevan
únicamente a estar furiosos; pero para evitar estos arrebatos o rabietas en el
futuro, tenemos que hacernos responsable de la situación pero sobre todo
responsables de solo y únicamente de nosotros.
La terapia que hace destacarse de las otras psicoterapias
es la TREC, simplemente esta terapia busca las soluciones a los problemas en la
cual los aborda de manera realista y no mágica. La TREC más que nada busca la
“autoaceptación incondicional” es decir; condena al pecado, no condenes al
pecador. Albert Ellis creo esta terapia en base a sus propias investigaciones y
experiencias clínicas. ¿Qué sucede con nosotros cuando nos enfadamos? ¿Qué nos
lleva a tener este efecto de la ira?, esto tiene una respuesta simple; las
personas no se alteran por los hechos, las personas se alteran sino por lo que
piensan acerca de los hechos; Albert Ellis consideraba que esto podría tener su
inicio en tres aspectos: la del pensamiento, la emocional y la conductual; y es
que nuestros pensamientos pueden incidir de manera más rápidas en nuestras
alteraciones psicológicas y empezar a presentar las llamadas distorsiones
cognitivas; ya que en consecuencia podemos llegar a tener las creencias
raciones y creencias irracionales. Los sentimientos negativos no siempre son
malos ya que puede haber sentimientos negativos sanos como por ejemplo; la
decepción, el pesar, la frustración. Sin embargo no tomos nuestros sentimientos
positivos pueden ser sanos e incluso ser adaptativos como por ejemplo; los
sentimientos de grandeza, prepotencia que lo más que nos pueden llevar es a una
mala relación interpersonal. La TREC ayuda a las personas a elegir y asumir
como propio una filosofía de vida. Si no cambiamos nuestra filosofía de vida de
base pueden surgir nuevamente creencias irracionales; las creencias
irracionales tienen ciertas características las cuales mencionare para así
tener un concepto más claro; no tienen una lógica consistente, no se pueden
probar a través de la realidad empírica, son absolutistas y dogmáticas pero
sobre todo, provocan emociones que perturban a la persona. La TREC argumenta
que una filosofía de vida basada en absolutismos y demandas está en la base de
muchos problemas emocionales, una filosofía de vida basada en el relativismo,
ya que todo es relativo, y en lo deseable es una característica central de la
persona psicológicamente saludable. la TREC indica que las personas utilizan
muchas veces el pensamiento freudiano, al momento de tener ira utilizamos
mecanismos de defensa como la evitación, negación, racionalización,
desplazamiento, entre muchas otras simplemente para negar la existencia de los
problemas o minimizar la gravedad del asunto; pero todo esto va a depender de
cada persona como lo indique anteriormente, ya que depende de la percepción y
el pensamiento de cada uno, ya que somos personas únicas e irrepetibles con
distintas ideologías, cultura, entre muchos otros factores ambientales o
estímulos externos. Inconscientemente obviamos la idea que posiblemente nuestra
ira actual tiene mucho que ver con nuestra vida pasada, y vamos repitiendo este
escenario y prolongándolo cada vez más
¿pero qué debemos hacer ante esta situación? Para llegar a tal punto debemos
colocarlas en juicio, detectar el problema, diferenciarlo del resto y empezar a
debatir. ¿Qué métodos puedo utilizar para combatir la ira?; la TREC nos enseña
métodos emotivos para combatirla y entre ellos están los siguientes: empezando
con la autoaceptación, recordemos que somos responsables de nosotros mismos y
para ello debemos aprender a vivir con nuestra propia existencia y entender que
no debemos dejarnos llevar por la ira y saberla como controlar; el siguiente
paso sería trabajar por mantener estos pensamientos y sentimientos de
autoaceptación, tenemos que volverlo un hábito constante, volverlo parte de
nuestra vida cotidiana y no trabajar en ella un día sí y otro día no. La
autoaceptación puede ayudarnos de tal manera que podemos incluso aceptarnos plenamente
con rabia y solo es cuestión de dedicarle tiempo a vivir con la auto
aprobación, tenemos que recordar que no existe nadie mejor que tú para poder
controlar la ira, todo es parte del autocontrol y no actuar simplemente con el
pensamiento de que “debería” ya que todos somos capaces y suficientes de lograr
lo que nos proponemos. La ira nos prepara de manera mental mediante el
pensamiento así que debemos aprender a relajarnos, ¿Cómo me puedo relajar? Una
técnica seria la relajación muscular progresiva, nos enseña a tensar y relajar
diferentes grupos de músculos siguiendo un orden específico y una manera bien
sencilla podría ser el humor ya que el humor corta de raíz los acontecimientos
desagradables y por lo tanto torna innecesaria nuestra ira. Recordemos que
aferrarse al deberismo es condenarse a la desilusión; es mejor ser un espíritu
libre.
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